No tengo una orientación política definida, si bien hace unos años me interesaba de alguna manera por este tema, intentaba forjar mis ideas y empezaba a tomar cierta conciencia, pronto observe la falta de honradez y transparencia en cuanto a sistemas políticos en este país y deje de interesarme.

No sé hablar de política, yo en esta materia tengo mucho más que escuchar antes que defender alguna postura que pueda tener, lo cual no significa que me vaya a incluir en alguna ideología. Sin embargo, con la movilización de estos días, comporto objetivos y por primera vez me siento vinculada a un colectivo de este ámbito. Aunque, hay algo que me ha sorprendido mucho a lo largo de esta semana al charlar con otros manifestantes es que no piensan o se cuestionan seriamente el hecho de votar, y eso crea en mi una gran contradicción, sales a la calle a pedir algo, a exigir cambios pero a la hora de la verdad, donde cuentan tu opinión y te van a hacer caso es en las urnas, de hay el excesivo acoso de publicidad constante de "vótame a mi, vótame a mi" que acordona a las elecciones.

Con todo esto, ayer una señora de mi barrio comentando un poco este levantamiento, muy necesario y tardío, nos hablo de su pasado, de su padre comunista y del miedo que sufrió después de 8 años de cárcel y de salvarse por los pelos del fusilamiento, momento estremecedor y conmovedor, se me vuelve a erizar la piel al recordarlo, en medio de la conversación alguien dijo algo como en "esa época no teníamos otra alternativa que luchar" entonces yo divagué bastante con esto, lo sigo haciendo...