"Porque solamente las ilusiones eran capaces de mover a sus fieles, las ilusiones y no las verdades. Y había más que eso, había la interseción, el acesso por las ilusones a un plano, a una zona inimaginable que hubiera sido inutil pensar porque todo el pensamineto lo destruía apenas procuraba cercarlo. Una mano de humo, lo llevaba de la mano, lo iniciaba en un descenso, si era un descenso, le mostraba el centro, si era el centro, le ponía en el estomago, donde el vodka hervía dulcemente cristales y burbujas, algo que otra ilusión infinitamente hermosa y desesperada habra llamado en algun momento inmortalidad.
Cerrando los ojos alcanzó a decirse que si un pobre ritual era capaz de excentrarlo así para mostrarle mejor un centro, excentrarlo hacia un centro sin embargo inconcedible, tal vez no todo estaba perdido y alguna vez, en otras circustancias, despúes de otras pruebas, el acesso sería posible. ¿Pero acceso a qué, para qué? Estaba demasiado borracho para sentar por lo menos una hipotesis de trabajo, hacerse una idea de la posible ruta. No estaba lo bastate borracho para dejar de pensar consecutivamente y le bastaba ese pobre pensmiento para sentir que lo alejaba cada vez más de algo demasiado lejano, demasiado preciso para mostrarse a traves de esas nieblas torpemente propicias."