15 julio, 2014
12 julio, 2014
Ayer invite a Miriam a merendar, prepare tarta de zanahoria porque no la había probado nunca y quería ser yo quien le regalase un sabor nuevo. Me alegre un montón de que saliese tan rica y de que le gustase hasta el punto de repetir. Como planeamos algo juntas, esta mañana me he puesto manos a la obra, no se si podremos hacerlo antes de que nuestras vacaciones nos separen, pero con muchas ganas y algo de esfuerzo todo se puede conseguir. Como vuelvo a la bella Florencia, apenas tendré unos días para prepararme el idioma antes de marchar pero esta vez tengo todo el tiempo del mundo para indagar en todo lo que no es una ciudad turística y volverla a ver de noche, esta vez pretendo pasearla a medianoche, es tan fresca esa ciudad que solo con recordarla recorre mi piel ese aire fresco de sus calles y por unos instantes el horror pegajoso del infierno sureño desaparece.
Hoy mi dia consistira básicamente en leer, no solo la guía, tengo también varios cómics que he dejado para estos meses de calor donde me refugio en una esquinita debajo del aire acondicionado hasta que el maldito sol se esconda, también cogeré la bici y sacaré a Scully a pasear después de inflarla a sus galletas favoritas. Quiero tanto a esa chica, me encanta que ponga sus patitas encima mía, que se vuelva completamente loca al verme, sinceramente ojalá pudiese provocar esa sensación en las personas porque llena y da una alegría increíble aunque a veces cuando comienza a quedarse dormida le hago la jugarreta de moverme de sitio solo para ver que hace, y ella se levanta medio zombie y se vuelve a poner cerca mío, ese gesto es simplemente magnifico. La voy a echar de menos.
05 julio, 2014
No me puedo quitar esa imagen de la cabeza y ese olor. Pensaba que las historias y las cosas mas increíbles y sorprendentes las veria en una pantalla, puesto que en ella puedes crear mundos, romper dimensiones, reglas... Y mis pequeños ojos vuelven a impactarse de la forma mas brutal con lo mas mundano de la vida, su fin. Esa imagen no se separará nunca de mi. La sumo a la de hace unos años en Madrid, han pasado años de ese suceso y lo recuerdo como si fuese ayer.
Ayer al regresar a esa casa, mientras limpiaban lo del accidente, yo entre al salón y en esas horas vi cual era su asiento, un sillón grande y viejo justo enfrente del televisor, se nota que el resto de sofás estaban sin usar, prácticamente nuevos. En esa sala ahora llena de luz había cajas y cajas de películas, ninguna foto o algún tipo de recuerdo. Con esos rallos de luz que se colaban por las ventanas me preguntaba el por que de lo ocurrido, yo no pretendía hacer ningún tipo de juicio pero hay estaba yo recorriendo esa habitación y veía todas esas películas como una distracción de la realidad, como una excusa a sus obligaciones, veía en todas esas películas la realidad que el tomaba, alejándose de su vida y tomando la de los personajes como suya, veía esas películas, exhibidas limpias, nuevas, cuidadas y al lado la suciedad de sus años. Veía una adicción, un desvió, una solución a sus problemas. De vez en cuando ese olor volvía. No se cuantas vueltas di a esas cuatro paredes, descubrí que compartíamos una pasión, un mismo amor y me dolía preguntarme si era de la misma manera, sabia que lo que estaba viendo podría perfectamente ser mi futuro pero me preguntaba si ese hombre tuvo alguna opción, entonces enfrente de una edición especial de James Stewart reluciente, llore y lloré. Claro que las tuvo pero las rechazó. Y entonces esa duda de si el estaba loco o era el único cuerdo entre los locos.
Cuando quedó limpio todo aquello, yo tenia que buscar unos papeles, para prepararlo todo y ofrecerle a ese hombre de nuevo su condición de persona y de los cajones solo salían películas y mas películas, aquí no hay nada mas que películas decía en voz alta, lo que antes me hubiese parecido algo así como el paraíso, era la mas pura de las tristezas ahora. Después llego mi hermana y me alegre de no estar sola.
No voy a negar que esto me ha puesto a prueba, cuando lo encontramos fue una prueba de humildad absoluta para todos aquellos que nos encontramos esa situación, ninguno de los allí presentes reaccionamos de la misma manera. Le dige a mi hermana que no entrase allí e hice que mi abuela se saliese.
Tengo un vago recuerdo de una llamada de mi tía, no se que hora era yo ya estaba dormida, me agradecía lo que había hecho, me reconocía que la que se ha llevado el golpe mas duro he sido yo y que ella no ha sido capaz de lo que he hecho yo. Lo necesitaba.
Si algo he aprendido de esto es que no soy una cobarde, que donde otros se paran, yo tengo el valor para seguir aunque este muerta de miedo. Lo de ayer lo hice por mi familia y sé, intuición femenina, que no lo podía haber hecho otra persona mas que yo.
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